lunes, 27 de junio de 2011

Postmodernismo y Signos Subordinados

Retomando el tema de Glee la serie actualmente se encuentra dentro de una dimensión organizada e incorporada que se es transmitida como una base de información que proviene del exterior del signo mismo. Pero, ¿Hasta dónde llega el poder de los medios de comunicación y la masificación de la audiencia? El perceptor mismo le ha generado millones de dólares a la casa productora de dicha serie sino también a los mismos actores, generando juegos, karaokes, y ¿qué es lo único que se demuestra? Una vez más, el conformismo no solo de la sociedad americana; sino lo más decepcionante que es el egoísmo del ser humano que los medios conllevan con su reproducción. 


Interacción Parasocial...

El ser humano debería ser capaz de tener una visión realista de lo que en verdad quiere y definir las necesidades que en verdad tiene, sin dejar que su falsa necesidad lo convierta en un ignorante de por vida, dejando detrás todo aquello que corte la raíz del conocimiento que le brindan los libros.
Dejando la pregunta a consideración ¿Hacía donde camina la humanidad con la dependencia de un medio? que, en realidad lo único que busca es tener el control de esta y haciéndolo sentir una interacción parasocial inexistente.




México y su conformismo...

En México el problema no son los medios como tal, es la ideología y el conformismo que existe en el país, donde la educación es meramente banal y sin sentido y donde no solo las escuelas tiene el papel más importante en la educación del futuro de México, los padres son el principal factor de crear niños masificados desde pequeños y convirtiéndolos en dependientes del medio como tal

Cuarto poder...

Tal como sucede actualmente dentro del país, donde el gobierno dispone del apoyo de las dos cadenas televisoras más importantes, las cuales no solo dan información con efecto de teléfono descompuesto, sino que además se jacta de decir que en el país no ocurre nada grave y que el presidente de la republica a sabido hacer su trabajo. Pero hasta donde va a llegar el pueblo mexicano cuando los medios no hacen más que cubrir las patrañas que el gobierno hace no solo con el dinero de los impuestos, trafico de drogas, trata de personas y los genocidios en Cd. Juárez, sino con lo más importante el futuro del país no solo económicamente sino como la nación que se ha estado perdiendo a lo largo de los años. Y que, si tan solo los medios hicieran por informar la realidad, el pueblo mexicano podría defenderse; pero claro, eso jamás va a ocurrir por que el llamado “cuarto poder” como los son los medios, perderían precisamente toda autoridad y poder de convencimiento sobre su audiencia.

MMC...

Los medios masivos de comunicación incluyendo el internet, poseen el poder para mover masas de manera increíble ya que se mueven de manera cognitiva con el perceptor hasta el punto de llevarlos de la mano para que voten por el candidato que en realidad no es el mejor sino el que pago más dinero a la casa televisora. Cuando se tiene una audiencia tan débil o tan masificada al medio como tal se le es fácil brindarle al perceptor a medias solo para calmar la necesidad de estar informado. 

Ignorancia...

Si se hablara de una comparación de la situación vivida en Fahrenheit 451 con la situación actual en el país, diría que aún no se llega al punto de la quema de libros como muestra de autoridad pero, ¿qué más se puede hacer para que la gente no piense? Si bien es cierto, actualmente a la gente no se le prohíbe tener o leer libros, pero tampoco hay una cultura arraigada que sobreponga leer un buen libro antes que estar embaucado con la televisión interponiéndose como un ser inerte pero motivador a no solo seguir con el estilo que lleva sino a estancarlo dentro de una sociedad innata e insatisfecha con lo que ha logrado o no ya que el contenido televisivo es crucial para que el ser humano pueda o no tener una continuidad en su vida.

Selectividad...

En México, la vida cotidiana va encaminada de la llamada selectividad. Y que según la teoría de las masas  la audiencia es víctima de la agresión de los poderosos medios de comunicación pero, qué pasa cuando el típico mexicano prefiere ver programación que si bien no toda es basura, este elige lo que literalmente lo “entretiene” y ya, solo se conforma con programas que van de la mano con el consumismo y el perceptor a su vez prefiere vivir en la ignorancia, antes que enterarse de lo que en realidad se vive en el país y en el mundo, dado que esto podría afectar la cotidianidad con la que vive y con el vacio que cree que es llenado por los medios.